martes, 9 de diciembre de 2014

CÒMIC


CONCIERTO DE LANZAMIENTO "SIGO INVICTO"


16 de Diciembre, Viernes: Concierto de Lanzamiento, Club “Los Trupillos” – Santa Marta

Gaviota herida - Silvestre Dangond y Diomedes Diaz.

LÍNEA DE TIEMPO




DISCOS DE SILVESTRE DANGOND




SILVESTRE DANGOND: EL REY DE LA ´NUEVA OLA´




SILVESTRE FRANCISCO DANGOND CORRALES, nacido en el municipio de Urumita (La Guajira), un 12 de mayo de 1980, es hijo del otrora cantante William José "El Palomo" Dangond Baquero, quien a mediados de la década del setenta, hiciese pareja musical con Andrés “El Turco” Gil, dejando en el recuerdo diez sencillos y un trabajo musical completo. Su madre, Dellys Corrales Rojas, nacida en el seno de una familia con vocación musical, de quien seguramente heredó el carisma que irradia cada vez que sube una tarima, recibiendo además de su parte, una esmerada educación formal y personal.
Fue precisamente al lado de ella con quien pasó su primer año de vida en casa de los abuelos paternos, este contacto con la vida de pueblo es lo que seguramente aporta a sus composiciones, la frescura, naturalidad y sinceridad que constituyen lo mejor de su estilo. Un año más tarde, en 1982, sus padres ven la necesidad de formalizar un hogar independiente, decidiendo radicarse en la ciudad de Valledupar. Relata su madre: "La niñez de SILVESTRE fue una infancia muy bonita, era un niño que se hacía querer, encontrando en su familia un apoyo constante debido a su particular espontaneidad a la hora de expresar sus sentimientos, mostrando siempre un interés excesivo por la música vallenata, llegando en muchas ocasiones a escaparse en horas de la noche, si por donde estuviese pernoctando escuchaba las notas alegres de un acordeón".
Sus estudios escolares los iniciaron en el Jardín Nacional, donde se caracterizó por su simpatía y buen compañerismo, seguidamente adelantó los años de la educación básica primaria en el Colegio Colombo-Ingles y la finalizó en el Colegio Parroquial El Carmelo. En ese momento su afinidad por el vallenato se desarrollaba de tal manera que para ese entonces ganaba los primeros premios es los festivales de canto infantiles. Refiere su padre: "El talento que tiene SILVESTRE es algo que siempre cultivo y se le veía entonando las canciones de su padrino Jorge Oñate. Recuerdo con emoción como a los 13 años graba una canción dedicada a Valledupar.
Siendo aun muy joven SILVESTRE, sus padres se trasladan a la capital de la republica y fue allí donde empezó su arduo trabajo con dedicación por dar a conocer el talento que poseía. Inició ese proceso presentándose en fiestas privadas junto con su gran amigo y compañero de aquel entonces "Coco" Zuleta, quien al ver el potencial que tenía este jovencito urumitero, decidió empezar a trabajar con él.


PRINCIPALES EXPONENTES DEL GÉNERO VALLENATO

Uno de los principales exponentes del género vallenato reconocido a nivel mundial es el desaparecido DIOMEDES DÍAZ MAESTRE, quien falleció en  diciembre del año 2013. Grabó más de 36 álbumes musicales y todas las canciones tuvieron gran acogida entre el público, de los expononentes del género vallenato él era quien conservaba aún el estilo del vallenato tradicional con ritmos como: el merengue y la puya.






Otros artistas que ha incursionado en el vallenato ´nueva ola´y se han mantenido como los más apetecidos por el público nacional e internacional por su estilo propio son:

  • SILVESTRE DANGOND


  • FELIPE PELÁEZ

  • CARLOS VIVES


  • MARTÍN ELÍAS


  • PÉTER MANJARRÉS



  • ALEJANDRO PALACIO

  • JORGE CELEDÓN

  • IVÁN VILLAZÓN







martes, 2 de diciembre de 2014

ANTECEDENTES


HISTORIA DEL VALLENATO EN COLOMBIA




Lo que hoy se conoce como FOLCLOR VALLENATO nació en las sabanas, caminos y pueblos perdidos de la Costa Norte de Colombia.
Su difusión se le debe en sus principios a los moradores de la región, que aún sin tener una preparación académica de acordeón, aprendieron a amansarlo para acompañar a los instrumentos de percusión que ya dominaban, y que les servía de fondo y de acompañantes para exteriorizar todos los demonios que tenían dentro en forma cantada, para entregar un recado, para dar una mala noticia o confesar sus amores.
Dagoberto Puello afirma en su Historia del vallenato que “con muy contadas excepciones, aprendieron a tocar (interpretar) el acordeón, pese a desconocer en absoluto las notas del pentagrama musical. Su aprendizaje se hacía por "oído" y practicaban a diario, bien en el cambuche (Rancho) de su huerta (también la llaman rosa) o en el extenso patio de la casa en los pueblos”.
Francisco "El Hombre", cuyo verdadero nombre era Francisco Moscote, era un “mensajero” que hacía la ruta entre los pueblos de las sabanas del Cesar y La Guajira a lomo de burro, llevando las noticias y recados al pueblo donde llegaba, que le entregaban en el pueblo que acababa de visitar. Llegaba al centro del pueblo, en la plaza, y comenzaba a tocar su acordeón y a cantar las noticias y las “razones” que le interesaban a la gente que al escuchar las notas del acordeón de Moscote, salían corriendo para la plaza a ver si las noticias cantadas traían alguna esperanza de algún familiar del que no tenían noticias.
Cuenta la tradición que en una de su corredurías, Francisco Moscote se encontró en el camino con el mismísimo Diablo, quien lo retó a tocar el acordeón, a ver cual de los dos lo hacía mejor, la leyenda dice que Moscote le ganó al Diablo tocándole el “Credo” al revés, y como la contienda fue debajo de una palmera, ésta quedó chamuscada cuando el Diablo se fue vencido y mal geniado. Debido a todo lo anterior, se asigna a Francisco Moscote como el precursor de la música vallenata.
El acordeón encontró buena acogida en las clases populares donde se convirtió en pieza fundamental para las parrandas. Naciendo entonces ritmos que el pueblo bailaba acompañados por la música de acordeón, como el chandé, el pajarito, la colita y otros más. Otros ritmos que en las sabanas de Bolívar y Sucre se interpretaron con este instrumento sonoro, fueron El porro y la Cumbia.
Las canciones que se escuchaban en esa época, eran interpretadas con guitarras, y maracas. Tal vez parodiando a las grandes agrupaciones musicales de las Antillas, que eran aceptadas a gran escala en todas las clases sociales. Pero cuando el acordeón entró a reemplazar a la guitarra o a acompañarla, se consiguió una tonalidad musical que fue aceptada por un grueso número de pobladores.
Las agrupaciones que nacían se caracterizaban porque el acordeonero era el mismo cantante y se hacia acompañar de una caja y una guacharaca. La primera que es un tambor pequeño con cuerpo de madera tallado en su interior y con un parche que para entonces era de cuero, primordialmente de "Cuero é Chivo"; algunos cajeros utilizaron Cuero de Perro, siempre buscando una mejor sonoridad. Hoy en día La Caja posee un cuerpo bien moldeado y su parche es especial, se utiliza el plástico. 

La guacharaca se hace de una mata (arbusto) que se conoce con el nombre de "lata de púas". Se corta un trozo de unos treinta a cuarenta centímetros y se le saca el centro del tallo que es blando, quedando como una canal. En su "lomo" se tallan varias ranuras, que al ser frotadas con un trinche especial de metal, produce su sonido característico. En la actualidad ha sido reemplazado por los de metal, siempre buscando un mejor sonido, pero en el Festival Vallenato se exige el de madera. Su nombre proviene de un ave que en la Costa Atlántica, canta en las serranías y que es "ave de buen agüero" para los campesinos, su canto se asemeja un poco al sonido de ésta. Es el único instrumento autóctono con que cuenta la música de acordeón, ya que los otros son foráneos: El acordeón es de origen Alemán y la caja de origen Africano.